miércoles, 28 de marzo de 2012

Valoración y recuperación en unidades de media y larga estancia

               
La discapacidad condiciona directamente la percepción de calidad de vida y está asociada, entre otros, a un incremento en la probabilidad de institucionalización y de reingresos, a mayor carga del cuidador principal y a un aumento de la mortalidad.
Este deterioro funcional suele acompañar al proceso de envejecimiento, pero la hospitalización es una de las situaciones vitales que lo disminuye bruscamente.


Se ha demostrado que la aplicación en este período de cuidados generados a partir de la valoración geriátrica integral, que incluyan al menos las áreas clínica, psicoafectiva, sociofamiliar y funcional, producen beneficios en salud, específicamente una mejora en las actividades básicas de la vida diaria.

El grado de deterioro funcional durante la hospitalización se ha asociado a múltiples variables, a menudo relacionadas entre sí. Se han descrito, entre otras, la mayor edad, el género femenino, el mayor deterioro funcional, el menor soporte social y la procedencia de residencias o centros sociosanitarios.
 
Entre las variables clínicas asociadas se han descrito las enfermedades crónicas, estableciéndose con mayor peso la enfermedad cardiovascular o respiratoria, la enfermedad metastásica, la demencia, la diabetes mellitus o la hipoalbuminemia.
 

La actividad rehabilitadora, dentro de la valoración geriátrica integral multidisciplinaria, se ha mostrado efectiva para mejorar la funcionalidad de pacientes ingresados en unidades polivalentes de media y larga estancia de Medicina Interna. Para mejorar la eficiencia de estas unidades, es útil incorporar escalas validadas para seleccionar a los pacientes que más pueden beneficiarse así como para desarrollar estrategias de continuidad asistencial. Finalmente, para que esta actividad rehabilitadora pueda desarrollarse en otros ámbitos geográficos, es necesario incorporar a la práctica clínica sistemas de valoración geriátrica integral. Estas estrategias parecen tener también similar eficacia en hospitales de agudos.




BIBLIOGRAFÍA
Fernández Moyano A. Valoración geriátrica integral y recuperación funcional en unidades de media-larga estancia, 2010. Disponible en: http://www.elsevier.es/es/revistas/revista-clinica-espa%C3%B1ola-65/valoracion-geriatrica-integral-recuperacion-funcional-unidades-media-larga-13146526-editorial-2010

Calidad de vida en ancianos con problemas urológicos


Durante mucho tiempo el tratamiento médico a supuesto el pilar fundamental a la hora de trata los problemas de los pacientes urológicos, pero con las necesidades de promoción en salud y el empuje de la atención primaria se pone de manifiesto la necesidad de aportar calidad de vida a los pacientes ancianos. 
Diremos, por tanto, que existe una tendencia a percibir el proceso de la enfermedad de una forma más amplia, enfocando no sólo el objetivo de tratar a los pacientes en orden de "agregar años a su vida", sino también para mejorar su aspecto físico, emocional, y social, es decir, "para agregar vida a los años". La revelación de los resultados de la Calidad de Vida, convirtió este aspecto en un resultado importante dentro de los estudios clínicos.


El término "calidad de vida" se trata de una serie individual de sensaciones, certezas y opiniones; siendo un concepto realmente abstracto, subjetivo y cambiable. Los factores sociales, físicos, financieros, culturales y emocionales interactúan modulando la calidad de vida.

En 1977, el término "calidad de vida" fue utilizado por primera vez en el Medical Subject Headings (MeSH) y se definió como: "un concepto genérico que demuestra la apreciación de la modificación y la mejoría de las cualidades de la vida, en lo físico, político, moral y social" 

Con la metodología estandardizada de las pruebas psicométricas, es posible cambiar un concepto subjetivo como calidad de vida en un resultado clínico mesurable. El interés y la importancia de la opinión de la calidad de vida para el propio paciente y para los profesionales clínicos se convierte pues en un aspecto fundamental en la práctica diaria de la valoración clínica.

Es evidente que procesos tumorales urológicos afectan significativamente a la calidad de vida de los pacientes. Aunque en esencia, condiciones benignas y situaciones de bajo riesgo, tales como la hiperplasia beningna de próstata y la incontinencia urinaria pueden tener un gran impacto en la calidad de vida de los pacientes en diversos grados.               

Desde enfermería se recomienda una valoración periódica de los problemas prostáticos, si bien es verdad que aun no existe evidencia que fundamente este criterio de promoción de la salud. Una correcta valoración enfermera del problema urológico en el anciano puede ayudar a percibir de forma mas clara el problema y así estudiar como afecta el mismo en la calidad de vida de los ancianos.


BIBLIOGRAFÍA
Lobo Heldwein F. Salud y calidad de vida en urología: Aspectos en urología general y oncológica, 2009. Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S0004-06142009000700001&script=sci_arttext&tlng=pt

domingo, 25 de marzo de 2012

Cuidados paliativos

La enfermera en cuidados paliativos debe participar en el control de síntomas, asegurar el respeto por la autonomía y los derechos de la persona, ofrecer acompañamiento, respetar los valores y estilos de vida, atender la singularidad, perseguir el bienestar, la calidad de vida, la continuidad de los cuidados, y el trabajo en equipo, como aspectos inherentes del cuidado profesional. Tal desafío conduce a desarrollar la atención enfermera en cuidados paliativos desde la gestión global del cuidado.    
El modelo de Cuidados Paliativos tiene como pilar básico la visión global de la persona y la búsqueda del bienestar a través del cuidado, al igual que el paradigma enfermero, aspecto que hace que la enfermera trabaje en un contexto muy cercano a su propia disciplina.
La estructuración interdisciplinar como método de trabajo en cuidados paliativos, facilita que la enfermera participe en la toma de decisiones activamente, intervenga en el diálogo interdisciplinar, gestione y facilite el proceso asistencial. El rigor científico y profesional es imprescindible para desarrollar la autonomía profesional, para conseguir una visión del rol profesional enfermero en cuidados paliativos y para poder plantear y defender el cuidado profesional como uno de los ejes centrales de la atención paliativa.
                          
Como demuestra la práctica diaria y la evidencia realizada al respecto de los cuidados paliativos la enfermería encargada de dichos cuidados debe:
- Es necesario definir y consolidar el desarrollo de las competencias enfermeras en cuidados paliativos
- Es necesario contemplar la práctica profesional del proceso de cuidados enfermeros en el marco de un modelo conceptual y en el desarrollo y aplicación del método científico enfermero.
- Es necesario la visualización de la aportación específica en el seno de un equipo multidisciplinar derivada de la competencia profesional.
- Es necesario avanzar en prácticas reflexivas basadas en evidencias científicas y plantearse retos en investigación.
- Es necesario iniciar una línea de investigación en competencias enfermeras en cuidados paliativos.

La culminación de este objetivo solo será posible desde un proceso de integración profesional, del dominio de las competencias propias y de la investigación basada en evidencias científicas, que favorezca la práctica enfermera de calidad y de muestras de un que hacer profesional y humanizado en el ámbito paliativo.

BIBLIOGRAFÍA
Codorniu N. Cuidados enfermeros en Cuidados Paliativos: Análisis, consensos y retos, 2011. Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S1132-12962011000100015&script=sci_arttext&tlng=e

jueves, 22 de marzo de 2012

Incontinencia urinaria en pacientes con demencia

La incontinencia urinaria es una problema frecuente e incapacitante de salud entre los ancianos. Afecta a un tercio de las mujeres mayores, el 15-20% de los hombres mayores, 50% de los ancianos frágiles y 60-80% de los ancianos en residencias.
La incontinencia urinaria asociada con la demencia es un problema significativo. Se trata de una comorbilidad muy común entre los residentes de asilos de ancianos con demencia.

La incontinencia urinaria puede dar lugar a patologías médicas, estrés del cuidador e institucionalización temprana. La incontinencia urinaria es por tanto un grave problema que puede ser un marcador general para la puesta en escena de la demencia. A pesar de que la incontinencia urinaria es un problema potencialmente tratable, pocos son los artículos que han estudiado esta en relación con la demencia y su impacto en la calidad de vida de los pacientes y sus cuidadores.

La aparición de la nicturia en pacientes que no tienen incontinencia urinaria puede significar un factor de predicción para que se desarrolle en el futuro. La atención temprana y la intervención de la nicturia puede ayudar a reducir el riesgo.
El uso de balances hídricos y el registro de orina en 24 horas puede ayudar a realizar un diagnóstico de la nicturia.

                                 Factores de riesgo para la nicturia: 
- Vejiga hiperactiva
- Trastornos del sueño
- Edema periférico
- Insuficiencia Cardíaca Congestiva
- Poliuria
La movilidad es otro de los factores que puede condicionar la aparición de incontinencia urinaria, mejorar la movilidad de los pacientes con demencia puede ayudar como prevención.
El sexo masculino es un factor predictivo importante. La incidencia relativamente alta de la obstrucción del tracto urinario inferior (36,8%), principalmente debido a la hipertrofia de próstata en pacientes de sexo masculino, explica el aumento del riesgo de IU en la población estudiada.

La presencia de incontinencia urinaria puede hacer que el paciente se sienta incomodo por miedo a perdidas de orina en público, perdiendo la confianza en si mismo y agravando el aislamiento social ya de por si deteriorado debido a la demencia de este tipo de pacientes. Todo esto puede contribuir al desarrollo de ansiedad y de síntomas depresivos que reduzcan sustancialmente la calidad de vida global del paciente. 


La aplicación de cuidados y tratamientos en una fase temprana del problema pueden ayudar a mejorar la calidad de vida en estos grupos de pacientes, mejorando la salud emocional y reduciendo el aislamiento social lo que podría tener un impacto muy positivo sobre la función cognitiva y la prevención del posterior deterioro mental. 


BIBLIOGRAFÍA
Miu DK, Lau S, Szeto S. Etiology and predictors of urinary incontinence and its effect on quality of life, 2010. Disponible en: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/20446932

miércoles, 21 de marzo de 2012

Gelatinas, una alternativa a la disfagia

 La disfagia es un síndrome muy prevalente entre la población anciana, sobre todo en los usuarios de los centros geriátricos en los que la demencia, está presente en un alto porcentaje de las plazas residenciales para personas dependientes.

A los múltiples mecanismos implicados en la pérdida de peso en las personas con demencia se suma la alteración progresiva de la deglución con aparición de disfagia en las fases más evolucionadas, en las que las broncoaspiraciones son frecuentes y la causa más común de las infecciones respiratorias de repetición que condicionan la fase final de esta enfermedad.


El envejecimiento afecta a la deglución, habitualmente por alteraciones funcionales en la propulsión del bolo o por el enlentecimiento de los reflejos orofaríngeos. También está disminuida la percepción orofaríngea de la viscosidad de los líquidos.
                                  
El aumento de las enfermedades neurodegenerativas y vasculares cerebrales, hace que la disfagia esté más presente en esta población y, a nuestro juicio, deba considerarse como un síndrome geriátrico más. Además de las modificaciones ambientales y la rehabilitación, los recursos habituales en el abordaje de la disfagia incluyen el tratamiento postural y la modificación de la textura de los alimentos.


Las gelatinas han tenido gran difusión como estabilizadores y modificadores de texturas en el campo de la alimentación. En el campo sanitario, además de en la disfagia, se han utilizado también para la hidratación, rehabilitación y como galénica para la medicación. Diversos autores han señalado la apariencia homogénea y pulida de las texturas gelificadas.



¿Cómo podemos alimentar a estos pacientes?
Además de intervenir en el medio ambiental, el abordaje postural, etc., las recomendaciones de intervención nutricional señalan que, si la vía oral es utilizable, las alternativas a emplear son: dieta triturada, líquidos espesados, fortificación de la dieta, alimentación básica adaptada y suplementación nutricional. La anorexia, las apraxias y los trastornos conductuales explican, con frecuencia, que los residentes no consuman la totalidad de la dieta ofertada, precisando suplementos con alto aporte energético en un volumen reducido para mejorar su aporte nutricional.

BIBLIOGRAFÍA
Gómez Busto F, et al. Suplementos nutricionales gelatinizados: una alternativa válida para la disfagia, 2011. Disponible en:
http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S0212-16112011000400016&script=sci_arttext&tlng=e

martes, 13 de marzo de 2012

Delirium en ancianos hospitalizados

El síndrome confusional agudo (SCA) o delirium es un síndrome clínico de inicio agudo y curso fluctuante de origen generalmente multifactorial, caracterizado por pensamiento desorganizado, compromiso del nivel de conciencia y de la atención.

Factores de riesgo:
- Gravedad del cuadro en el momento de la internación
- Deterioro cognitivo
- Alteración de la visión y audición


Factores desencadenantes:
- Contención física
- Polimedicación
- Uso de sonda vesical
- Deshidratación
- Trastorno del sueño
- Iatrogénia


Diversos estudios demuestran que tanto en el delirium como en la demencia existe una disminución en el metabolismo cerebral, con déficit de la actividad colinérgica e inflamación, reflejando una similitud en los mecanismos fisiopatológicos metabólicos, celulares y clínicos.

Como demuestra la evidencia el SCA tiene un alto nivel de prevalencia, pero muchas veces el SCA es subdiagnosticado, especialmente cuando se manifiesta con síntomas de hipoactividad.
Existen varias comunicaciones de trabajos en nuestro país y en el exterior que demuestran que la presencia de SCA se asocia a una evolución más tórpida, con mayores índices de morbilidad y mortalidad intrahospitalaria y aumento del tiempo de internación.


El conocimiento de las consecuencias asociadas al desarrollo de delirium durante una internación es de suma importancia para mejorar la atención médica y para informar a los familiares sobre el pronóstico a corto y largo plazo y poder programar los cuidados necesarios para después de una externación.






Es fundamental determinar con certeza cuáles son los factores precipitantes modificables para intervenir de manera precoz y evitar el desarrollo del SCA y así reducir sus complicaciones e implementando los cuidados oportunos.


BIBLIOGRAFÍA
Vazquez FJ, et al. Delirium en ancianos hospitalizados, 2010. Disponible en:
http://www.scielo.org.ar/pdf/medba/v70n1/v70n1a03.pdf

Prevención de caídas y malnutrición

Las personas mayores constituyen un grupo poblacional en aumento, siendo el grupo de los más ancianos el que presenta el crecimiento más rápido. En estas personas ancianas las caídas y la malnutrición son 2 síndromes geriátricos frecuentes generadores de morbimortalidad.
Se han descrito prevalencias del 30 – 60% de caídas y del 5 – 10% de riesgo nutricional en las personas mayores de 65 años de la comunidad, aumentando ambas prevalencias en los mayores de 89 años.

Así, las caídas se consideran uno de los problemas más importantes coexistentes con el aumento de la edad and de manera que un 50% de las personas que se han caído vuelven a caerse después del primer episodio. Frecuentemente, los mayores no son conscientes del riesgo de caídas, no reconocen los factores de riesgo y tampoco los comunican al profesional sanitario. Consecuentemente, las oportunidades de intervenciones preventivas son descuidadas hasta que se hacen necesarias después de la caída. Entre las lesiones relacionadas con las caídas, las fracturas son las más graves. Entre el 4–6% de los ancianos que caen presentan fracturas, siendo la más grave la de fémur.
malnutrición constituye otro síndrome geriátrico importante en salud pública, más prevalente entre las personas institucionalizadas, así como en los más ancianos y en las mujeres. Es una situación que se asocia a limitación de la calidad de vida, incremento de la morbilidad, susceptibilidad a las infecciones, necesidad de nueva institucionalización y/o hospitalización, prolongación del tiempo medio de estancia hospitalaria, mayor número de complicaciones y mayor riesgo de reingresos y mortalidad.

Las medidas preventivas eficaces deben incluir programas de intervención basados en la comunidad. Dichos programas deben incluir estrategias multidisciplinares, bien en la población general o bien de forma individualizada. Así diversos programas de intervención individualizados y multifactoriales mediante terapia ocupacional o ejercicios físicos, medidas de intervención comunitaria, mejora dietética y, revisión de la prescripción farmacológica crónica han demostrado reducir el número de caídas en la comunidad.

BIBLIOGRAFÍA
Ferrer A, et al. Ensayo clínico aleatorizado de prevención de caídas y malnutrición en personas de 85 años en la comunidad, 2012. Disponible en: http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0211139X09003230

sábado, 10 de marzo de 2012

Escalas de valoración: riesgo de UPP



  

Las úlceras por presión (UPP) constituyen un importante problema de salud que afecta a todos los sistemas sanitarios desarrollados. Existe un amplio grado de consenso en considerar que la prevención constituye el método más eficiente de abordar el problema. La valoración del riesgo es un aspecto clave en la prevención. El objetivo de la valoración del riesgo es la identificación de los individuos que necesitan medidas de prevención y la identificación de los factores específicos que los ponen en situación de riesgo. Para ello se utilizan las escalas de valoración del riesgo.

Medidas de prevención:
1. Valoración del riesgo de desarrollar una UPP.
2. Cuidados de la piel.
3. Reducción de la presión: con medidas generales, mediante el uso de superficies especiales de manejo de la presión, y locales, mediante apósito y otros materiales específicos.
4. Educación.

El objetivo de la valoración del riesgo es la identificación de los individuos que necesitan medidas de prevención y la identificación de los factores específicos que los ponen en situación de riesgo. 
                                                     
Escalas de valoración:

Una escala de valoración del riesgo de desarrollar UPP sería, por tanto, un instrumento que establece una puntuación en función de una serie de parámetros considerados como factores de riesgo.

Algunas de las ventajas en el uso de las escalas de valoración del riesgo son: 

1. Asegura la asignación eficiente y efectiva de recursos preventivos limitados.        
2. Sirve de soporte de las decisiones clínicas.
3. Permite el ajuste de casos, en función del riesgo en estudios epidemiológicos.
4. Facilita el desarrollo de protocolos de valoración del riesgo.
5. Sirve como prueba en casos de litigios.

A continuación se enumeran las escalas de valoración validadas hasta la fecha, estas son desarrolladas en el artículo en el que está basada esta entrada y el cual figura en la bibliografía de la misma.
- Escala de Norton
- Escala de Waterlow
- Escala de Braden
- Escala Emina
- Escala de Cubbin - Jackson
En este anexo se muestran las escalas de la misma forma en la que se encontrarían en centros de asistencia sanitaria, para conocer y saber aplicarlas a los pacientes que requieran dicha valoración: http://scielo.isciii.es/img/revistas/geroko/v19n3/136helcos_anexo.htm

BIBLIOGRAFÍA
García Fernández FP, Pancorbo Hidalgo PL, Soldevilla Ágreda JJ, Blasco García C. Escalas de valoración del riesgo de desarrollar úlceras por presión, 2008. Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S1134-928X2008000300005&script=sci_arttext

jueves, 8 de marzo de 2012

Consecuencias de la inmovilidad en el aparato respiratorio



La inmovilidad prolongada produce múltiples modificaciones en el ámbito del aparato respiratorio, que favorecerán la aparición de diversas complicaciones.
Los 3 grandes grupos de problemas de salud que vamos a atender, de forma domiciliaria, a pacientes inmovilizados son: el síndrome de inmovilidad del anciano, el paciente posquirúrgico y el paciente con enfermedades neuromusculares.

En los 3 casos, la inmovilidad prolongada va a producir modificaciones de carácter respiratorio, como:
- Disminución de la capacidad vital.
- Aumento producción de moco.
- Disminución movilidad ciliar.
- Menor reflejo tusígeno.
- Atelectasias.
- Neumonías por aspiración.


Medidas preventivas generales

a) Ejercicios respiratorios:
– Ejercicios diafragmáticos. Inspirar elevando el abdomen y
espirar descendiéndolo, para así potenciar el diafragma.
– Ejercicios de expansión torácica, donde se pretende localizar la ventilación en una región específica del pulmón.
– Ejercicios con espirómetro incentivador, indicado en la
prevención y el tratamiento de las atelectasias.
– Respiración con los labios fruncidos. Este ejercicio aumenta la presión en las vías aéreas y ayuda a prevenir un
colapso de éstas.



fisioterapia respiratoria en el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona, Servicio Rehabilitación Respiratoria 

b) Movilización de secreciones con drenaje bronquial, tanto
autónomo como asistido (clapping y/o vibración torácica).

c) Drenajes posturales, que por acción de la gravedad facilitan la salida de las secreciones del árbol bronquial, y de este modo se sustituye el déficit de función ciliar.

d) Tos autoasistida o educación de la tos. Consiste en enseñar a toser después de una inspiración profunda durante la espiración, y hay que procurar hacerla en 2-3 tiempos para arrastrar las secreciones.

e) Otras medidas físicas que se deben tener en cuenta son:
cambios posturales frecuentes, correcta hidratación del paciente, incorporación temprana, utilización de humidificadores ambientales, etc.


A tener en cuenta
• Las complicaciones respiratorias en el paciente
inmovilizado constituyen una elevada causa de
mortalidad, por lo que debemos prevenirlas de
forma temprana. La prevención pasa por medidas
como el drenaje bronquial y postural, los ejercicios
respiratorios, educación de la tos, etc.
• Tanto la fisioterapia como la rehabilitación
respiratoria son métodos de fácil aplicación con muy
buenos resultados.
BIBLIOGRAFÍA
Vicente Martín M. Complicaciones respiratorias en el paciente inmovilizado: prevención y tratamiento, 2007. Disponible en: http://www.jano.es/ficheros/sumarios/1/0/1646/33/1v0n1646a13101298pdf001.pdf

miércoles, 7 de marzo de 2012

Diagnósticos e intervenciones prevalentes en ancianos hospitalizados

El crecimiento rápido de la población anciana y la demanda de servicios adecuados de salud vienen aumentando e imponiendo una mayor carga para los profesionales de la salud, administradores de políticas públicas, gobiernos y la sociedad en conjunto. En este contexto urge la necesidad de que los cuidadores por
la salud, independe del país de origen, comprendan las características de las comunidades ancianas, su fuerza y sus necesidades.

Las enfermeras juegan un rol importante en el cuidado de los pacientes crónicos. Innovaciones sobre la práctica de enfermería para el cuidado de pacientes crónicos, vienen siendo implementadas en diversos países, para producir nuevas formas de cuidados en salud.
                                  
Uno de estos enfoques es permitir que las especialistas asuman la asistencia del paciente con la finalidad de promover el autocuidado, mejorar la calidad de vida de su salud y reducir los costos.




Identificar los diagnósticos de enfermería prevalentes en la práctica asistencial, en ancianos
hospitalizados y analizarlos en relación con el tiempo de hospitalización y con los cuidados prescritos a través del estudio de las historias clínicas en un hospital universitario es un método para trabajar sobre ellos y disminuir los costos aumentando el autocuidado y centrando el cuidado enfermero en los diagnósticos que mas requieran de nuestra intervención.


Los cuatro diagnósticos prevalentes entre los 62 identificados fueron: 
- Déficit en el Autocuidado-baño/higiene
- Alteraciones en la Nutrición por defecto
- Riesgo de Infección
- Patrón Respiratorio Ineficaz


Por tanto algunos cuidados imprescindibles en los que podemos intervenir son:

- Ayuda en el baño en cama
- Informar la aceptación de la dieta
- Implementar rutinas de cuidados para la punción venosa
- Vigilar patrón respiratorio


BIBLIOGRAFÍA
Abreu Almeida M. et al. Diagnósticos de enfermería e intervenciones prevalentes en el cuidado al anciano hospitalizado, 2008. Disponible en: http://www.scielo.br/pdf/rlae/v16n4/es_09.pdf


Síndromes Geriátricos: Diagnósticos de Enfermería

Las consecuencias fisiológicas y patológicas del envejecimiento, contribuyen en gran medida a la aparición de los principales síndromes geriátricos. 
                                                  
Entre los principales síndromes geriatricos tenesmos:
- Dolor
- Temblor
- Incontinencia urinaria
- Estreñimiento
- Diarrea
- Fatiga y debilidad
 
- Prurito senil
- Aislamiento y trastornos mentales

A menudo, estos síndromes pueden ser consideradas erróneamente como cambios normales del envejecimiento, lo que aumenta la cronicidad en las personas mayores, de ahí la necesidad de investigar los diagnósticos de enfermería relacionados con este fenómeno, para dar un atención continuada y de calidad con el fin de reducir los riesgos que estos síndromes implicanPor lo tanto, nos 
acercamos a los siguientes objetivos: Identificar y analizar los diagnósticos de enfermería relacionados con la presencia de síndromes geriátricos en ancianos hospitalizados.  

Uno de los objetivos fundamentales de todo profesional enfermero es lograr una práctica sistemática, a fin de proporcionar la asistencia apropiada a las necesidades reales y potenciales, contribuyendo eficazmente a la recuperación y mantenimiento de la salud y la espera para ayudar a reducir la incidencia de complicaciones y tiempo de hospitalización y la readmisión de la población anciana

Analizados los cinco síndromes más principales, encontramos que el número de diagnósticos queda repartido de la siguiente manera (expresado en porcentajes):
- Aislamiento social (32,8%)
- Iatrogenia (28,6%)
- Inestabilidad postural (20,6%)
- Insuficiencia cerebral (11,1%)
- Incontinencia urinaria (6,9%). 

 Con estos datos se evidencia la gran labor que tiene la enfermería para atender las necesidades biopsicosociales, basándose en una valoración geriátrica multidimensional, identificando el bienestar físico, mental funcional y social de los pacientes ancianos.

También demuestran que los cuidados de enfermería para esta población plantea retos con una compleja gama de necesidades en el aspecto biopsicosocial. Ya que
 las personas mayores tienen necesidades médicas y sociales diferentes y tienden a utilizar los servicios más intensivos y centros de salud, por lo que se debe garantizar una atención integral para disminuir estas tasas. 


En resumen, es importante que la enfermería sea consciente de las características específicas de las personas mayores y del proceso de envejecimiento y en el caso de que los signos y síntomas demuestren un síndrome geriátrico emergente seamos capaces de detectarlo con rapidez, prevenir la progresión y ofrecer planes de tratamiento para asegurar su implementación en el corto, mediano y largo plazo, teniendo en cuenta la continuidad asistencial, de promoción, prevención, tratamiento y rehabilitación de sus funciones propias, como evidencia este artículo.


BIBLIOGRAFÍA
Miranda de Sousa R, Ferreira Santana R, Espírito Santo FH, Geronimo de Almeida, Ferreira Alves L. Los diagnósticos de enfermería identificados en ancianos hospitalizados: asociación con síndromes geriátricos, 2010. Disponible en: http://www.scielo.br/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1414-81452010000400012

martes, 6 de marzo de 2012

Valorar el nivel de independencia en pacientes hospitalizados

Aumentar el nivel de independencia de los pacientes a nuestro cargo es una premisa constante en la ejecución de nuestros cuidados y además ha servido de fundamento para algunas de las teorías que han dado forma al marco conceptual de nuestra profesión. De hecho, conseguir el menor grado de dependencia posible de las poblaciones es un objetivo que compartimos las enfermeras con otras disciplinas científicas, ya que la dependencia, la podemos considerar como un sinónimo de la discapacidad.
 

El índice de Barthel, trata de aproximarnos cuantitativamente al nivel de dependencia-independencia de un paciente, según como sea su realización de las ABVD. Cada una de estas 10 actividades se valora de forma independiente otorgándole una puntuación de 0, 5, 10 ó 15 puntos, obteniéndose una puntuación total que puede variar desde 0 (dependencia total) a 100 (independencia).

                                                                         
La recuperación o el mantenimiento de la independencia funcional es un resultado de salud que puede ser abordado desde varias perspectivas:

- Por un lado, forma parte de los resultados en salud catalogados como clásicos: calidad de vida, mortalidad, morbilidad, satisfacción, resultados de las pruebas clínicas….
- Pero, por supuesto, también se trata de unos de los denominados resultados sensibles a la práctica enfermera, que se definen como "estado, conducta o percepción de un individuo, familia o comunidad medida a lo largo de un continuo en respuesta a intervención(es) de enfermería"

El objetivo del trabajo que realizaron y que yo os expongo es determinar cómo varía el nivel de independencia de los pacientes tras un período de ingreso hospitalario. Para ello se utiliza e, índice de Barthel y se observa la evolución desde el ingreso hasta el alta del Hospital.

La enfermería tiene mucho trabajo para aumentar el nivel de independencia y durante la estancia de un paciente en un hospital sería un buen momento para administrar nuestros cuidados, estos son cuidados basados en algunas necesidades de Virginia Henderson:

 
Oxigenación: 

 - Conocer hábitos sobre la oxigenación. 
 - Enseñar al anciano a adaptar sus necesidades a las limitaciones.

Alimentación: 
 - Conocimiento de los hábitos sobre la alimentación del anciano. 
 - Realizar dietas según gustos. 
 - Enseñar al anciano la forma de utilizar alimento, valores nutritivos y calóricos.

Eliminación: 
 - Conocer hábitos sobre la eliminación: Horario, frecuencia,y costumbres. 
 - Instruir al anciano en cuanto a la necesidad de una dieta, hidratación adecuada e higiene perineal minuciosa.
- Preparación conjunta de un programa para la adaptación a las modificaciones funcionales y de corrección de hábitos inadecuados.

Moverse y mantener buena postura corporal:
- Conocer hábitos relativos a la actividad cotidiana, de ejercicio, postura, alimentación, hidratación, higiene y utilización del tiempo libre .
- Informar sobre el mantenimiento de posturas adecuadas , ejercicio físico , dieta equilibrada y supresión de hábitos tóxicos .
- Planificar un programa de actividades sobre gustos , aficiones y posibles limitaciones individuales del anciano .

Reposo y sueño: 
- Conocer los hábitos en cuanto a horario, duración, influencia del medio, etc.
- Enseñar al anciano las características del sueño y la necesidad de reposos.
- Planificar un programa de actividad y de periodos de reposo.

Higiene y arreglo personal: 
- Conocer los hábitos higiénicos del anciano, horario, costumbres, frecuencia y duración.
- Realizar educación sanitaria sobre los hábitos higiénicos para mejorar la calidad de vida del anciano.
- Planificar programas de higiene y orientación en la forma de vestir más acorde con su aspecto físico.

Temperatura corporal: 
- Conocer hábitos referidos a la necesidad del mantenimiento de la temperatura corporal : ejercicio, aporte calórico, nutricional, vestido, higiene .
- Enseñar al anciano que medidas para combatir el frío y el calor .
- Planificar conjuntamente programas en los que se relacione al ejercicio/ reposo y a las dietas equilibradas.

Evitar peligros: 
- Conocer los hábitos del anciano para mantener un entorno seguro. 
- Enseñar al anciano a la prevención de accidentes. 
- Preparar de forma conjunta programa de prevención.

Comunicarse: 
- Conocer los hábitos del anciano a la hora de comunicarse.
- Realizar educación sanitaria para fomentar el mantenimiento de los órganos de los sentidos.
- Diseñar programas que permitan expresar los sentimientos y las emociones del anciano.
                                                  
Como se demostró en este estudio y en contra de lo que se pueda pensar, el hecho de que un paciente esté hospitalizado no quiere decir que disminuya su independencia sino todo lo contrario como demuestran los datos obtenidos gracias a la información que nos proporciona el índice de barthel.
No obstante es importante realizar más estudios para obtener mayor evidencia y que enfermería pueda seguir trabajando en esta dirección

BIBLIOGRAFÍA
Blanca Gutiérrez, J.J., Caraballo Núñez, M.A., Luque Pérez, M., Muñoz Segura, R. El aumento de la independencia de los pacientes en el hospital, 2009. Disponible en: http://scielo.isciii.es/scielo.php?pid=S1695-61412009000200004&script=sci_arttext

sábado, 3 de marzo de 2012

El envejecimiento facial, teorías científicas

El proceso de por qué, cómo y cuándo envejecemos es algo que ha preocupado durante siglos a diversos grupos de investigadores, y ha llevado a que a través del tiempo y de la historia, hallan surgido múltiples teorías y explicaciones en torno a este fenómeno.


La revisión que expongo, brinda un pequeño recuento de lo que significa el envejecimiento para diversos autores. Además revisa las teorías, tanto genéticas como moleculares, más relevantes en la actualidad, para finalmente mostrar los efectos de dicho proceso en las estructuras de la cara.
El envejecimiento es un proceso biológico por el cual toda persona sufre cambios en determinadas características fisiológicas que hacen que su aspecto externo y sus procesos internos se modifiquen en el transcurso de la vida. Estas modificaciones están influenciadas por diferentes factores como son el ambiente, la carga genética, el estilo de vida y la etnia entre otros, lo cual hace que su estudio e incluso su simple definición sea bastante compleja y difícil de determinar con exactitud.

                         
En esta tabla podemos ver las distintas hipótesis acerca del envejecimiento, todas tienen un elemento en común como es la aparente programación genética, además de la asociación con desgaste del cuerpo debido a la exposición a sustancias nocivas durante el ciclo de vida. Estas variables están pues relacionadas y se observa una constante interacción entre la genética, el medio ambiente y la sociedad.
Las principales hipótesis que se manejan en la actualidad y que son motivo de estudio molecular incluyen:


1. Daño y reparación del ADN 
La replicación del ADN y la síntesis de proteínas son procesos fundamentales para la vida de todo organismo, de ahí que cuando fallan, se puede alterar el ciclo normal de la vida. Quienes apoyan esta teoría argumentan que cuando fallan, se puede alterar el ciclo normal de la vida. Además exponen que los errores en varias moléculas se acumulan en un punto donde la falla metabólica finalmente ocurre, manifestándose en cambios de edad y finalmente muerte.


2. Teoría del daño oxidativo, radicales libres 
Los radicales libres son moléculas inestables que poseen carga eléctrica con uno o más electrones, resultantes de las reacciones metabólicas de oxidación - reducción y que poseen un efecto altamente tóxico y dañino atacando las membranas celulares.




BIBLIOGRAFÍA

Noreña Atehortú J. C., Lloreda C. E. Entendimiento del envejecimiento facial, 2007. Disponible en: http://www.medilegis.com/BancoConocimiento/C/CirugiaPlastica-V9No-1_vejez-facial/art_vejez.htm

ABVD, edad y género en la vejez

Con respecto a las ABVD y su relación con la edad, parece ser que la evidencia indica que existe una estrecha relación entre ambas ya que el porcentaje de personas con limitaciones a nivel funcional aumenta conforme abarcamos grupos de mayor edad poblacional. 

En este trabajo que se expone se plantean dos objetivos:

1. Analizar si existe relación entre las diferentes dimensiones que componen el bienestar psicológico y las actividades básicas de la vida diaria. 

2. Analizar la relación que existe entre las ABVD y las dimensiones del bienestar con la edad y el género. 


El Índice de Barthel, como medida de ABVD, es una de 
las escalas más utilizadas para la valoración funcional de 
personas ancianas en trabajos como de este tipo. 
Este índice está constituido por 10 ítems que valoran la capacidad de realizar ciertas actividades sin ayuda, y se puntúa de forma cuantitativa en una escala de 0 (completamente dependiente) a 100 (completamente independiente).


En relación a las escalas de Bienestar Psicológico de 
Ryff, se seleccionó de entre las diferentes versiones la de 54 ítems, compuesta por seis dimensiones.

                             

Los resultados principales con respecto a las actividades de la vida diaria fueron: 
a) relaciones positivas y sistemáticas con las dimensiones de bienestar
b) relaciones negativas con la edad
c) una media en el Índice de Barthel más alta para los hombres. 
- Por lo que respecta a las dimensiones de bienestar de Ryff, los resultados también mostraron relaciones negativas de la edad con todas las dimensiones, que fueron de mayor cuantía para las dimensiones propias del bienestar psicológico frente al subjetivo. 
- Se observaron también diferencias de género significativas en autonomía, crecimiento personal y autoaceptación: los hombres puntuaron más alto.
De este modo, se debe de tener en cuenta que, a la hora de evaluar la salud de los ancianos, no sólo se deben priorizar los indicadores más propios de ésta, sino que también deben tenerse en cuenta indicadores de carácter psicológico como es el bienestar, que mantiene una relación directa con la autopercepción.
En este vídeo se muestran algunas ideas para ayudar a los pacientes ancianos en la práctica las actividades diarias.

BIBLIOGRAFÍA 
Meléndez J. C., Tomás J. M., Navarro E., Actividades de la vida diaria y bienestar y su relación con la edad y el género en la vejez, 2011. Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/redalyc/pdf/167/16717018019.pdf

jueves, 1 de marzo de 2012

El envejecimiento

Envejecimiento
Debido al aumento de la esperanza de vida y a la disminución de la tasa de fecundidad, la proporción de personas mayores de 60 años está aumentando más rápidamente que cualquier otro grupo de edad en casi todos los países. El envejecimiento de la población puede considerarse un éxito de las políticas de salud pública y el desarrollo socioeconómico, pero también constituye un reto para la sociedad, que debe adaptarse a ello para mejorar al máximo la salud y la capacidad funcional de las personas mayores, así como su participación social y su seguridad.

El envejecimiento de la población genera distintos
movimientos cíclicos en el mundo occidental que afectan a
las situaciones de dependencia. Las personas
con problemas más graves de salud ahora viven hasta edades avanzadas, aunque las ganancias en esperanza de vida serán años con discapacidad.

                                      
El envejecimiento primario
Es un proceso gradual e inevitable de deterioros temporal que empieza temprano en la vida y continua a lo largo de los años, de manera independiente de lo que la gente haga  para evitarlo.

El envejecimiento secundario
Consiste en los resultados de la enfermedad, el abuso y el desuso, factores que a menudo son evitables y que están dentro del control de la gente.
Al comer de manera sensata y de mantenerse en buenas condiciones físicas durante la edad adulta, muchas personas evitan los efectos secundarios del envejecimiento.


Enfermería geriátrica
La enfermería tiene por tanto en este apartado una gran labor a realizar. 
La llamada enfermería geriátrica se encarga de la valoración, planificación y aplicación de los cuidados de enfermería a los ancianos para satisfacer sus necesidades y la evaluación de la eficacia de dichos cuidados en el logro y mantenimiento de un nivel de bienestar acorde con las limitaciones impuestas por el proceso de envejecimiento



BIBLIOGRAFÍA
Organización Mundial de la Salud [sede Web]. Madrid: Organización Mundial de la Salud ; [acceso el 4 de mayo de 2012]. Disponible en: http://www.who.int/topics/ageing/es/

Inicio, breve introducción



Hola mi nombre es Israel Rived, Hoy día 17 de abril comienzo mi blog acerca de los cuidados de enfermería en geriatría.

Cada entrada versará acerca de un tema que estará en relación con los temas estudiados durante las clases de la asignatura Cuidaos del Anciano que se imparte en 3º de enfermería en la Universidad San Jorge.
Mediante la realización de este portafolio intentaré exponer, basandome siempre en evidencia, algunos de los problemas que sufren las personas mayores, analizarlo y comentar las conclusiones para ayudar a darle mayor fundamento al portafolio.
Aunque es la primera vez que se nos imparte esta metodología como parte de nuestro trabajo espero realizarlo adecuadamente.

Gracias y bienvenidos.